Asistencia Sanitaria Privada
Llegadas estas fechas tan señaladas, la gran mayoría de las compañías nos inundan con ofertas para la contratación de las pólizas de asistencia sanitaria.
Un seguro que nos da acceso a una sanidad privada donde lo que prevalece es la rapidez. Acceder a especialistas de prestigio en hospitales de primer orden con una atención personalizada, donde nos realizarán todo tipo de pruebas diagnósticas e intervenciones, sin hacer listas de espera y encima en habitación individual.
El único problema es que no es oro todo lo que reluce. Si de por sí es un ramo complejo para analizar las coberturas por la terminología médica que usa, las ofertas son campañas de captación de nuevo negocio que difuminan la realidad del producto donde las personas solamente analizan el precio.
No se paran a valorar el coste que tendrá la póliza cuando se pase la oferta, que pasará, no conocen, ni en muchos casos les explican, las limitaciones que tiene cada una. Si tienen carencias y para qué enfermedades o pruebas diagnósticas se van a aplicar. Si cubren o no los accidentes laborales y/o los de circulación, o ninguna de los dos.
No entran a valorar si tienen sistemas bonus – malus que dependiendo del uso de la póliza se irá encareciendo. En muchas ocasiones, terminan no pudiendo pagar la póliza por el coste de la misma. Otras incluyen como gancho a un centro médico de mucho prestigio en su cuadro médico para a los pocos años quitarlo y dejar a sus clientes en la estacada y derivarlos a centros o especialistas de menor prestigio.
Solamente os recomendaré que acudáis a un mediador que trabaje con cuatro o cinco compañías para que os haga una comparativa de las ofertas y productos que hay y os recomienden la que más se ajuste a vuestras necesidades.